Probablemente habrás oído a alguien decir: “Bueno, eso puede ser cierto para ti, pero no lo es para mí.”
Detrás de esta frase yace una confusión profundamente asentada entre los conceptos de la verdad y creencia. Claramente, todos tenemos derecho a nuestras creencias. Pero, ¿significa eso que tenemos nuestras propias verdades? No. La verdad es independiente de la creencia. Las creencias, por otro lado, son necesariamente personales.
Esto es lo mismo cuando se trata de verdades morales. Dios y Su Palabra se convierten en el estándar de lo que es moralmente verdadero o no porque las verdades morales provienen de tu carácter. Así que mientras las verdades morales no están para consideración como personales o subjetivas, las creencias pueden serlo. En Romanos 14, el apóstol Pablo deja claro que las cuestiones fuera de la ley moral universal de Dios-como qué comer y cuándo adorar-están entre un individuo y Dios. Específicamente para la adoración, él dijo, “cada uno de vosotros debe estar plenamente convencido de que el día que escojáis es aceptable” (Romanos 14: 5).
Personal beliefs are sometimes called “personal convictions.” Some people feel, for example, that it’s wrong to buy products on Sunday. Other feel that it’s wrong to enroll their kids in public school. Many of these people don’t condemn those who do otherwise, but they feel these are convictions they must follow.
Paul made this point clear when he referred to the Jewish regulations on what foods were pure or impure. “I know and am convinced,” Paul wrote, “on the authority of the Lord Jesus that no food, in and of itself, is wrong to eat. But is someone believes it is wrong [for them], then for that person it is wrong” (Romans 14:14). Personal conviction should be arrived at, then, after great care, study of Scripture, and the wise counsel of other mature Christians.
Pregunta: Explique la diferencia entre la verdad moral y la convicción personal.
Pregunta: ¿Tienes alguna convicción personal sobre algo que Dios no menciona específicamente en la Biblia?
Content adapted from Josh and Sean McDowell’s book, Preguntas Profundas sobre Dios y la Biblia.
